A bordo de un avión de línea, los comportamientos de algunos pasajeros resultan particularmente molestos para los miembros de la tripulación y los demás viajeros. Una experta en viajes reveló tres de estos actos que hay que evitar absolutamente durante un vuelo.
Samantha Brown, presentadora de un programa de viajes, citada este martes 4 de julio por The Sun, pasa mucho tiempo en aviones. Por lo tanto, conoce muy bien los comportamientos que realmente pueden irritar a los demás pasajeros.
En su sitio web dedicado a los viajes, ha publicado una larga lista de cosas que las personas deberían o no deberían hacer cuando se encuentran en un vuelo. En esta lista, hay tres comportamientos en particular que hay que evitar absolutamente para no parecer ese viajero aburrido que todo el mundo detesta.
Explotar burbujas de chicle
En primer lugar, Samantha considera que este gesto es «universalmente molesto». Insiste en que la gente no debería hacerlo en cualquier lugar, pero especialmente no en un avión.
Incluso reveló un método para hacer que alguien que lo hace al lado de uno deje de hacerlo. «Si alguien explota su chicle cerca de ti, comienza a saltar de forma espectacular cada vez que lo haga», aconsejó.
Con suerte, lo notará y entenderá la indirecta. Si no es así, gírate hacia él y pídele amablemente que pare.
Hablar con personas que llevan auriculares
Los auriculares se han convertido en un objeto muy importante para los pasajeros en aviones, especialmente para aquellos que quieren aislarse de los ruidos del entorno.
La experta en viajes afirma que los pasajeros que llevan auriculares están dejando claro a los demás viajeros que los rodean que no desean hablar y que deben dejarse en paz.
Al respecto, explica que «el avión puede ser un lugar ideal para hacer nuevos amigos, pero solo si ambas partes lo desean». Por lo tanto, si tu vecino de asiento lleva auriculares, no le des golpecitos en el hombro ni comiences a hablarle.
Para ella, llevar auriculares es una señal muy clara de «no molestar». En ese sentido, también sugiere a los pasajeros aprovechar este medio, poniéndose los auriculares cuando quieran terminar una conversación.
Dirigirse directamente a los niños de otros pasajeros
Los viajeros en avión saben lo difícil que es lidiar con los niños a bordo, especialmente si están inquietos, gritando o dando patadas en los asientos de los demás pasajeros.
Pero según Samantha, nunca se debe hablar con el hijo de otra persona en el avión. Las normas de etiqueta dictan que solo los padres deben hablar con sus hijos.
«Incluso si es tentador voltearse y comenzar a regañar al niño que está dando patadas en tu asiento, créeme, caerá en oídos sordos», explica.
Lo mejor que se puede hacer es encontrar al padre y pedirle amablemente que detenga el comportamiento de su hijo. Si hablar con los padres no resuelve el problema, Samantha recomienda dirigirse a una azafata para que resuelva el problema por ti.
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